Sorprendí a sus padres humanos destrozando mi bosque. Lanzaron a su cría a mis pies mientras huían. En lugar de devorarla, la crié como si fuera de mi camada. Ahora mi fea y tierna hija, no es ni lobo ni humano… ¿Cómo vas a ayudarla?
– Moro, La Princesa Mononoke
No hay comentarios:
Publicar un comentario